Cardiólogo en Guadalajara y Zapopan, Dr. Francisco Chavolla. Pide tu consulta de cardiología.

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Universidad de Guadalajara

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El consumo de bebidas energéticas se ha normalizado bastante en todo el mundo pero muy pocas personas saben que dañan gravemente el cuerpo.

Las bebidas energéticas contienen una gran cantidad de cafeína y diferentes estimulantes legales como el guaraná, el aminoácido taurina, sustancia L- carnitina, más azúcares y vitaminas.

¿Por qué las bebidas energéticas provocan riesgos en nuestro corazón?

Pues bien, revisemos cada uno de estos componentes.

Este tipo de bebidas altera gravemente la actividad eléctrica del corazón y aumenta la presión arterial. Si una persona padece de problemas cardiovasculares, estas bebidas pueden afectarla gravemente.

Estas bebidas contienen estimulantes legales que ayudan a convertir la grasa del cuerpo en energía y están aún más concentradas en una sola bebida que en los alimentos.

Hay muchas cosas de las bebidas energéticas que las personas pasan por alto. Hay ciertos grupos de personas quienes no deberían tomar este tipo de bebidas, entre este grupo de personas están los menores de 18 años, mujeres embarazadas, personas con sensibilidad a la cafeína, y quienes toman medicamentos.

El primer síntoma que ocurre cuando se toman bebidas energéticas es el aumento de la frecuencia cardíaca, la presión arterial y hace que la sangre se vuelva más espesa.

Comenzando por analizar la taurina, es un aminoácido que afecta niveles del agua y minerales que se encuentran en la sangre. El guaraná dentro de la bebida incrementa la cafeína que de por sí ya contiene.

El alto consumo de bebidas energizantes se ha asociado con paros cardíacos, infartos de miocardio, disecciones coronarias y vasoespasmos. Al igual que se asocia con otras enfermedades como hipertensión, obesidad, problemas renales y dentales.

Es de vital importancia entender que hay que tener mucha precaución con la interacción de estas bebidas. Modera su consumo y nunca las mezcles con alcohol ni otras sustancias.

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